Actividades Circenses


La inclusión de las actividades circenses en el programa escolar producto de prácticas
llevadas adelante por profesores/as en la propia escuela, constituye un hecho de gran
importancia.
En primer lugar porque, junto con la danza y la expresión corporal, había sido uno de los
contenidos abandonados, relegados a un segundo plano en un marco de deportivización y
medicalización de la Educación Física. Más aún, las actividades circenses fueron
eliminadas de las prácticas corporales que ingresan al ámbito escolar, quizás producto de
concepciones tecnicistas, basadas en el rendimiento y que dejan de lado lo expresivo, la
sensibilidad o la creatividad.
En segundo lugar, porque permite tomar desde el Área del Conocimiento Corporal un
elemento sumamente valioso de nuestra cultura nacional: el circo criollo, espacio en el
cuál no solo se realizaban malabares, trapecio o habilidades en el suelo, sino que en el
convivían el teatro criollo o el tango. Obras como Martín Fierro o Juan Moreira tuvieron
su lugar en el circo criollo mientras las puertas de los teatros solo permanecieron abiertas
para las obras “cultas” de origen europeo. (Programa del CEIP, 2008)









Circo Criollo: un saber popular e histórico

“Darle un lugar a las actividades circenses en la escuela es una forma de recobrar ese saber popular, histórico, cercano a lo expresivo y artístico para permitir que el niño tenga acceso a esta herencia cultural…” (CEIP, 2008, p. 240)

La inclusión de las actividades circenses en la escuela ha posibilitado el trabajo sobre uno de los aspectos de nuestra cultura popular, muchas veces dejado de lado, menospreciado, o como en el caso de la Educación Física, directamente negado y ocultado durante muchos años.
Es que el circo criollo constituye una forma peculiar de circo, propia del Río de la Plata. A diferencia de los circos europeos o del resto de América, el circo criollo constaba de dos partes: la que tenía que ver con las habilidades circenses propiamente dichas, y una segunda parte en la que se representaba una obra criolla.
El Circo Criollo ha sido reivindicado desde el teatro como uno de sus antecesores, sobre todo en lo que tiene que ver con la exhibición de obras de autores populares que en los grandes escenarios de Montevideo y Buenos Aires no eran presentadas.
Tal es el caso de Martín Fierro, Juan Moreira o Calandria, obras del teatro popular que el circo criollo permitió que llegaran a la población uruguaya, especialmente a la clase media y baja. “Bajo la lona de un circo de los hermanos Podestá nace la primera pantomima basada en una novela de autor argentino: Juan Moreira”, nos plantea K. Mateos en su libro “Florencio y su mundo” (Galain, 1999, p. 41).
Así, bajo la misma lona convivieron dos expresiones artísticas populares fusionadas en una sola: el teatro y las habilidades circenses.
“El circo fue el espectáculo más popular en estas tierras, durante los tiempos de la colonia y los de la vida republicana independiente” (Ciancio, G., disponible en http://www.henciclopedia.org.uy/autores/Ciancio/Podesta.htm) y aunque el de los hermanos Podestá fue el más famoso de los existentes, muchos otros recorrieron los caminos de Uruguay y Argentina llevando sus presentaciones a pequeños pueblos que los recibían en forma entusiasta.
Sin embargo, y a pesar de que el circo tuvo una importante presencia en nuestra cultura popular, sus “actividades corporales” fueron dejadas de lado y no ingresaron a la escuela del siglo XX. Es más, fueron invisibilizadas y desplazadas por aquellas prácticas corporales que apuntaban al disciplinamiento que a comienzos del siglo pasado imponía la burguesía. “El cuerpo allí exhibido en movimiento constante despertaba la risa, el temor y, sobretodo, la libertad” (Soares, 2005, p. 23). Ese cuerpo debía ser domesticado y estas prácticas no iban en ese camino, por lo cual debían ser dejadas fuera de lo enseñable.
Algunas técnicas del circo fueron tomadas por la gimnasia, pero quitándoles lo esencial, el espíritu espontáneo y creativo, sometiéndolas a la rigidez y esquema propio de la gimnasia europea. “Las técnicas de los acróbatas, con su transgresión e irreverencia en las inversiones al poner el mundo al revés, serán tomadas y domesticadas por las reglas estrictas del deporte a mediados del siglo XIX. Esta herencia no solo será negada sino que será combatida por la incorporación de principios de orden, disciplina y sistematización de técnicas que puedan ser controladas y evaluadas.” (Alonso, 2007, p. 326).
Retomar estas actividades en la escuela nos permite en primer lugar “poner en juego la posibilidad de construcción y conocimiento de la disponibilidad del sujeto en situaciones diversas y desafiantes que tienen como eje la improvisación, el trabajo cooperativo y la composición grupal entre otros” (CEIP, 2008, p. 240).
En segundo lugar “su abordaje en la escuela no solo debe visualizarse desde lo motriz sino también desde la reflexión y búsqueda de fuentes históricas, familiares y barriales” (CEIP, 2009, p. 240).
Quizás así, además de brindar a los/as niños/as la posibilidad de adquirir este saber popular, podamos empezar a hacer visible lo que durante tantos años fue ocultado.
Héctor Cirio

Bibliografía 
Alonso, V. (2007). Técnica y educación. Desde un saber como techné a una tecnología del cuerpo. Revista Educação Temática Digital, Vol. 8. Campinas.
Galain, J. P. (1999) Florida. Cien años de teatro. 1895-1995. Ed. del autor. Uruguay.
Ordaz, L. (1980) En El teatro argentino. 2. Desde Caseros al zarzuelismo criollo. Centro Editor de América Latina. Buenos Aires, Argentina.
Ordaz, L. (1980) En El teatro argentino. 3. Afirmación de la escena nativa. Centro Editor de América Latina. Buenos Aires, Argentina.
Programa del Consejo de Educación Inicial y Primaria. (2009) Montevideo, Uruguay.
Soares, C. L. (2001). Acrobacias e acrobatos. En Bruhns, H. T. y Gutierrez, G. L. "II ciclo de debates lazer e motricidade". Ed. Autores Asociados, UNICAMP, Brasil, p. 33-41.

Páginas web consultadas:
Ciancio, G. H enciclopedia. Circo y teatro: el espectáculo y el público en el Río de la Plata entre 1880 y 1930. http://www.henciclopedia.org.uy/autores/Ciancio/Podesta.htm
Franco, L. El circo criollo. Mágicas Ruinas. Crónicas del siglo pasado. http://www.magicasruinas.com.ar/revdesto064a.htm

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